Año tras año, venimos realizando diferentes actividades: proyectos de concienciación en centros educativos, talleres, conciertos reflexivos y algunas campañas de recogida de dispositivos.

Durante demasiado tiempo, hemos estado explotando y destruyendo los ecosistemas de nuestro planeta. Cada tres segundos, el mundo pierde una superficie de bosque equivalente a un campo de fútbol y, tan solo en el último siglo, hemos destruido la mitad de nuestros humedales. El 50% de nuestros arrecifes de coral ya se han perdido y para 2050, podrían desaparecer hasta el 90%, incluso si el calentamiento global se limita a un aumento de 1,5°C.

Restaurar los ecosistemas significa prevenir, detener y revertir este daño, pasar de explotar la naturaleza a curarla. Para ello, y precisamente en este día, arrancará el Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de Ecosistemas (2021-2030), una misión global para revivir miles de millones de hectáreas, desde bosques hasta tierras de cultivo, desde la cima de las montañas hasta las profundidades del mar. Solo con ecosistemas saludables podemos mejorar los medios de vida de las personas, contrarrestar el cambio climático y detener el colapso de la biodiversidad.

Este año, hemos querido desarrollar las actividades a través de talleres reflexivos, “Mejor reutilizar, que reciclar” desde donde debatir y trabajar propuestas colectivas para mejorar nuestro compromiso con el medioambiente. Para ello, contamos con el apoyo de la ‘Convocatoria de Medioambiente y Desarrollo Sostenible”, puesta en marcha por Fundación Montemadrid y CaixaBank.

Aunque nuestro proyecto Reutiliza.K está más centrado en la reutilización de dispositivos electrónicos, este año nos propusimos trabajar sobre la reutilización en un plano más amplio, visualizando otros productos que consumimos y que debemos reflexionar y reeducarnos parar reducirlo, en la medida de lo posible.

Elegimos en eslogan de “Mejor reutilizar, que reciclar” porque el reciclaje tiene que ser la última alternativa, siendo conscientes de que reciclar también contamina y con ello no siempre se recuperan las materias primas invertidas en su producción, sobre todo en lo relacionado con los dispositivos electrónicos.

Según datos de la Comisión Europea, anualmente se tratan 3,4 millones de toneladas de RAEE en la UE. Esto supone 7 kg por persona, el equivalente en peso a dos o tres ordenadores portátiles desechados por cada ciudadano europeo cada año. Prácticamente todos estos residuos recogidos se destinan a reciclaje o a su incineración para generar energía, a pesar de que se calcula que alrededor del 25% de los aparatos eléctricos que desechamos podrían reutilizarse.

Nos encontramos con un gran reto mundial, la agenda 2030 es la más inmediata para el Desarrollo Sostenible. Esta plantea 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible con 169 metas de carácter integrado e indivisible que abarcan las esferas económica, social y ambiental.

En nuestras manos está la sostenibilidad del planeta y el futuro de próximas generaciones, dejemos de pensar que tal vez sea tarde y pongamos lo mejor de cada uno.